No es que no pueda, es que no quiero.

Todos me dicen que le olvide, que él no es buena persona, que está jugando conmigo. Que lo mismo que me dice que me quiere a mí, se lo dice a otras, pero es que no puedo, no me entra en la cabeza. El tan solo imaginarme una tarde, una noche sin él, siento que el mundo se me derrumbaría. Sí, vale. Que todo el mundo le odia, que todos dicen que es un chulo, un salido, un motivado, un gilipollas, pero sabéis es MI GILIPOLLAS y si soy feliz junto a él, ¿qué mas os da si es bueno o malo? Lo importante es cómo me siento yo cuando estoy a su lado, quién soy yo cuando me besa, cuando me toca..
Y ¿sabéis lo más gracioso?
Que aunque así fuera, que no fuera bueno para mí. Ya no es que no pudiera olvidarlo. Es que tampoco haría el esfuerzo por hacerlo.

El miedo solo está en tu mente, libéralo.

¿Miedo a que? ¿A ser yo misma? Que equivocada estoy. Si me da la gana ahora mismo puedo coger un coche aun que no tenga carnet e irme a la otra punta del país, ¿quién dice que no puedo? ¿La ley? La ley está para saltársela, la vida está para vivir sin reglas y disfrutar de cada momento al máximo. Si me da la gana ahora puedo poner el CD de heavy metal y hacer que tiemble el suelo si quiero ¿quien dice que no puedo? Si quiero ahora puedo saltar en mi cama y saltar tan alto que esté a un paso de tocar el cielo. ¿Alguien me lo impide? Si quiero ahora mismo puedo entrar en la discoteca y marcarme en la misma de baile aun que no tenga ni puta idea de bailar y baile como un pato, total, soy libre, ¿alguien me lo impide? Gritar sin miedo lo que pienso, hacer lo que deseo, sin miedo al fracaso, o lo desconocido..
Y la cosa es que el miedo solo está en tu mente acostúmbrate a librarte de él, solo así podrás llegar a ser todo lo que te propones.

Ni siquiera pude decirte adios.

Quiero que me expliques. Explícame por qué no puedo olvidarte. Quizás sea eso verdad de que "el amor es una guerra" por lo fácil que es empezarlo y lo difícil que es terminarlo. Y pienso y no paro de pensar en lo que fué y no pudimos terminar. Ni siquiera un beso de despedida. Ni siquiera pude estar contigo ese último día que te fuistes. Me quedé con las ganas de besarte. De decirte que me enamoré de tí. Al final descubrí que cuando empezamos un camino, es fácil ver el principio pero nunca vemos el final.

El destino es el único que tiene la respuesta.

Una vez más, mi ilusión se fue al garete. Tarde o temprano tendría que reaccionar ¿no? Y darme cuenta que no eras para mí. Al menos me reconforta la idea de que podrás llegar a ser feliz sin mí. Todo nos irá mejor si no estamos juntos. Todo cambia, y por más que me cueste reconocerlo, la verdad duele y eso es verdad, y nunca sabemos que nos tiene aparejado el destino, no sé cual será el mío. Me equivoqué, me equivoco y supongo que con el tiempo me volveré a equivocar. No soy perfecta, de hecho me considero la persona más imperfecta de la tierra, será por eso por lo que cometo tantos errores. Pero por ahí se dice que no nos arrepintamos de aquello que nos hizo sonreir, TÚ me has hecho sonreir y no me arrepiento de haber pasado los mejores ratos de mi vida a tu lado. Pero ya no hay marcha atrás, no hay mal que por bien no venga. Ser o no ser, esa es la cuestión. Quizás no solo estoy llena de fallos y errores, sino también el camino me lo pone muy difícil. Tanto que cuando soy feliz algún bache del camino se empeña en destrozar mi felicidad y eso es lo que más duele. Creer tenerlo todo y que de la noche a la mañana, no tengas nada.¡ De eso estoy hablando! Con el paso del tiempo aprendí que los principios dan miedo, que los finales son tristes y lo que importa es el camino.